Las ayudas para personal investigador son apoyos económicos y recursos destinados a impulsar la labor científica, dentro de las empresas o en organizaciones públicas.
El formato puede ser: becas, subvenciones o contratos específicos. Tienen como objetivo facilitar la financiación de proyectos, la formación avanzada y la contratación de personal cualificado.
Las ayudas suelen estar dirigidas a profesionales del ámbito académico, doctorandos y doctoras recién tituladas, así como a grupos de investigación consolidados.
Dependiendo del programa, se pueden enfocar en investigadores en etapa inicial, con trayectoria consolidada o líderes de equipo. Algunas convocatorias se limitan a ciertas regiones o instituciones, mientras que otras son abiertas a nivel nacional o internacional.
- Existen diferentes modalidades:
- Bonificaciones de las cuotas de Seguridad Social para personal investigador y desarrolladores informáticos.
- Ayudas para la contratación de doctorandos por empresas y organismos de investigación.
- Ayudas del programa jóvenes investigadores.
- Ayudas Torres Quevedo para realizar proyectos de I+D en centros de investigación y empresas.
- Programa Investigo para financiar la investigación y la innovación contratando personal investigador.
Antes de solicitar una ayuda, conviene revisar con detalle las bases de la convocatoria, y tener claro que parte de la subvención se puede destinar para colaboradores externos o personal investigador propio.
Preparar la documentación con antelación y adaptarla a los requisitos establecidos es esencial, tanto para la solicitud como para la justificación. Resulta útil calcular el coste hora del personal investigador previamente para tener una referencia durante el proyecto.